Featured

Encuentro de Ciudadanas y Ciudadanos Latinoamericanos y del Caribe Residentes en Europa, Preparatorio de la Cumbre CELAC – UE 2025

DECLARACIÓN PÚBLICA

Señoras y señores representantes del cuerpo diplomático, delegadas y delegados, representantes de instituciones europeas y belgas, compañeras y compañeros de las organizaciones sociales, sindicales y comunitarias:

Es un honor presentar el resultado de un proceso colectivo de deliberación y construcción democrática que se remonta a iniciativas llevadas a cabo en 2015 que continuaron en el año 2023. También, desde agosto de este año estamos promoviendo una serie de conferencias con el objetivo de actualizar nuestra reflexiones y proposiciones en preparación a la cumbre CELAC – UE 2025.

Este proceso constructivo, que ha contado con la participación de diversas organizaciones, movimientos sociales y sindicales, nos convoca hoy para presentar oficialmente ante la Presidencia Pro Tempore de la CELAC, así como ante las instituciones presentes, los resultados y apuestas colectivas para la construcción de un futuro más justo, especialmente para quienes viven las consecuencias directas de la migración.

Contexto Global

Vivimos en un mundo donde el derecho al diálogo, la convivencia y la paz se han visto reemplazados por la guerra, el odio, la negación de la historia y de la diferencia. La xenofobia y la aporofobia han reforzado la exclusión, cruzando fronteras geográficas y éticas agudizando problemáticas como la pobreza, el hambre, la guerra y los flujos migratorios transfronterizos.

La movilidad humana constituye una realidad estructural en nuestras sociedades. Por distintas razones como la pobreza, la inseguridad, los conflictos o persecuciones políticas entre otras, los pueblos buscan a través de la migración una promesa de futuro mejor. En América Latina, en 2024, los niveles de participación en la fuerza de trabajo y de ocupación siguen siendo bajos, el desempleo pasó de 6,5% y la informalidad llega a 47,6% (OIT/informe Panorama Laboral 2024).  En la Unión Europea, en 2024 más de 93 millones de personas vivían en riesgo de pobreza o exclusión social (Eurostat), mientras que 44,7 millones de residentes nacieron fuera de la UE. Estos datos reflejan los desafíos de integración, empleo y derechos que enfrentan las comunidades migrantes. A pesar de los avances, persisten desigualdades estructurales que impactan con mayor fuerza en las personas en situación de migración o exilio.

La migración y el exilio, constantes humanas históricas, han sido el eje central de nuestra reflexión. Apostamos por el fortalecimiento de un mundo multipolar y democrático, basado en un nuevo acuerdo global de respeto, diálogo y apoyo mutuo.

Ante los desafíos actuales, es urgente definir estrategias y políticas claras. Por ello, exhortamos a la implementación de las siguientes medidas:

En Materia de Migración:

  1. Impulsar el desarrollo del Pacto Mundial de Migraciones, basado en la dignidad humana, el derecho universal a la movilidad con seguimiento técnico CELAC–UE cada dos años.
  2. Garantizar procesos de regularización con enfoque de derechos humanos, integración y empleo digno.
  3. Facilitar la reunificación familiar y la protección de niños, niñas y adolescentes migrantes.
  4. Establecer canales seguros y legales de movilidad laboral y académica, incluyendo mecanismos de reconocimiento mutuo de títulos.
  5. Garantizar la protección de los inmigrantes en Europa y el acceso al estatuto de refugio político para poblaciones vulnerables por conflictos, violencias y cambio climático.
  6. Garantizar la observación independiente de los derechos humanos en fronteras y centros de detención.

Nuestra prioridad es la búsqueda de respuestas para la mejora de las condiciones de vida y trabajo de personas en migración y el exilio, pero estamos conscientes que nuestra lucha va más allá y que la solidaridad debe ser nuestra bandera para una sociedad más justa e igualitaria, por eso llamamos la atención,

En materia de Justicia, Paz y Dignidad a:

  1. Erradicar las medidas coercitivas unilaterales y sancionar sus efectos criminales desde un imperativo ético y humanitario.
  2. Combatir el lawfare o guerra jurídica, que pervierte el sistema legal para criminalizar la disidencia. Proponemos movilizarnos para desenmascarar estas prácticas, fortalecer la independencia judicial y proteger a los perseguidos políticos.
  3. Promover una justicia independiente que ponga fin a la persecución de líderes sociales y se enfoque en penalizar los delitos de alto impacto que pervierten la garantía del estado de derecho y la democracia.
  4. Consolidar América Latina como territorio de paz, impulsando la diplomacia y la cooperación en zonas de conflicto como Venezuela, Colombia y Haití.
  5. Defender la humanidad y promover la prevalencia del Derecho Internacional Humanitario en todos los escenarios de conflicto, evitando afectaciones a la población civil y el genocidio como ocurre actualmente en Palestina.
  6. Exigir que Europa se desmarque de tendencias belicistas que socavan la soberanía de los pueblos y amenazan la democracia bajo pretextos que apelan a la seguridad nacional de los agresores.
  7. Solicitar a la Unión Europea el cumplimiento de compromisos internacionales que la obligan a cesar toda actividad que promueva, facilite o apoye la continuidad del genocidio del pueblo palestino, la represión y la estigmatización de las manifestaciones pacíficas que lo denuncian.
  8. Proteger la Convención de Ginebra como instrumento del derecho internacional garante para la protección y prevención de riesgos contra la vida de lideres sociales y defensores del territorio y de la naturaleza.
  9. Exigir el respeto al derecho internacional y especialmente a la Carta de las Naciones Unidas, que consagra el derecho a la autodeterminación de los pueblos.
  10. Promover un sistema económico justo que elimine la acumulación obscena de riqueza en manos de una minoría, a costa de la miseria de la mayoría y del daño a la naturaleza.

Reafirmamos nuestro compromiso con una cooperación birregional basada en la dignidad humana, la justicia social y el respeto a los derechos fundamentales. Las organizaciones firmantes nos ponemos a disposición de la CELAC y la UE para colaborar en el diseño, implementación y monitoreo de las políticas migratorias derivadas de este proceso.

Proponemos la creación de un mecanismo técnico CELAC–UE con participación de la sociedad civil para seguimiento e informes públicos anuales. Este mecanismo debe establecer indicadores comunes y garantizar el acceso público a los datos de implementación.

En un contexto global donde la amalgama entre migración y seguridad domina la agenda bilateral y multilateral, ha llegado la hora de la humanidad. Es el momento de la dignidad.

Como seres humanos y organizaciones comprometidas con el humanismo les damos la bienvenida a esta lucha conjunta por un futuro de paz.

Artículos relacionados

Comunicados: más artículos