En el contexto de la dictadura militar chilena (1973 – 1990), en el año 1982 a la edad de 20 años, Jorge se encontraba cesante y vendía berlines a las afueras de un policlínico de la ciudad de Talca, séptima región de Chile.
Así comienza su camino por la JOC.
Fue a través del diácono belga Guido Gossens y la compañera Luz María Troncoso que recibe la invitación a participar en el movimiento Juventud Obrera Cristiana. Sólo bastaron algunos testimonios y su valoración como joven trabajador para encender su espíritu de compromiso. Comenzó a reunirse con jóvenes del barrio, unos trabajaban y otros cesantes, formando así la base de iniciados, quienes después de sus acciones lograron participar como militantes en diferentes encuentros y ampliados, formando a su vez nuevas bases que dieron fuerza al movimiento nacional.
En el año 1987 participa como dirigente nacional, fortaleciendo la acción militante con representación en 8 regiones del país, organizando ampliados, encuentros nacionales y regionales, impartiendo cursos de capacitación a jóvenes trabajadores, charlas y coordinación con organizaciones populares y cristianas.
Reunión del Equipo Internacional de la JOCI, Lovaina, Bélgica, 1990
(izda a dcha: Stefan Gigacz, Ruben Joseph, S. Samydorai, Felix Ollarves, Jorge Silva y Padre Hugh O’Sullivan) - Fuente: Stefan Gigacz
En el año 1989 resulta electo como dirigente continental, apoyando y fortaleciendo el trabajo de países como Colombia, Venezuela, Costa Rica y México. Lugares donde dejó el sello del militante jocista y la amistad sincera que lo caracterizaba.
En 1994 ya de regreso a Chile, formó un hogar junto a Elena, Tiany, Seidy e Inti. En un comienzo no fue fácil su vida laboral. En 1996 hasta la fecha, trabajó como educador de trato directo en SENAME (Servicio Nacional de Menores).
En su incansable lucha por los trabajadores (as) y su convicción en la organización, asumió el rol como dirigente gremial, apoyando a sus compañeros y compañeras de funciones, logrando el respeto y cariño de quienes representaba. Fueron años de apoyo a través de marchas, huelgas, protestas y asambleas, en la búsqueda de lograr beneficios y fortalecer los derechos de todas y todos los trabajadores que atienden a niños, niñas y adolescentes de Chile.
Durante este año, y después de un largo caminar en busca de mejores condiciones para su vida, su vejez y obtener una tranquila jubilación, el sistema de administración indolente y perverso de sus empleadores no dio respuesta a sus solicitudes de mejora, generando en él la desesperanza y la soledad. El día 10 de julio de 2025 a sus 63 años, Jorge se quita la vida, dejando en quienes lo conocimos su legado:
“Siempre ir hacia adelante, trabajar con convicciones y permanecer de manera consecuente junto a los trabajadores (as)”
Jorge logró juntarse a 20 antiguos jocistas de todo el país el 1° de mayo pasado para celebrar el centenario de la JOC. Muchísimas gracias, Jorge, por tu compromiso y tu fidelidad al movimiento. Quedarás para siempre en nuestros corazones.
Reunión del Equipo Internacional de la JOCI, Quito, Ecuador, 1993
Fuente: Stefan Gigacz