La JOC América (JOCA) organizó con éxito una reunión de su equipo regional ampliado del 10 al 24 de noviembre de 2024, utilizando un formato híbrido con una reunión física en Quito, Ecuador, y participación virtual vía Zoom. La reunión reunió a militantes de varios movimientos nacionales y movimientos en extensión de la JOC, así como coordinadores, adultos que apoyan la JOC América y una representante del Secretariado Internacional de la JOCI.
A lo largo de la reunión, los debates se centraron en los procesos de acción de la JOC en Chile, Argentina y Perú, cada uno de ellos centrado en iniciativas de acción, como el ecofeminismo en la JOC Chile, la tutoría voluntaria en la JOC Argentina y la economía social y solidaria en la JOC Perú. A continuación, se evaluó el estado actual de los movimientos nacionales y de los movimientos en extensión dentro de la JOC, lo que permitió identificar los puntos fuertes comunes y los retos a los que se enfrentan los diferentes movimientos.
Entre los puntos fuertes identificados durante la reunión se encuentran el empoderamiento de los jóvenes trabajadores/as como motor de la acción para el cambio; el análisis de los aspectos sociales, políticos, económicos y culturales de la vida de los/as jóvenes trabajadores/as dentro de cada movimiento; el enfoque colectivo en temas acuciantes como la migración, la explotación de los/as trabajadores, la desigualdad de género y la educación precaria como puntos de partida para una acción eficaz; el énfasis en la importancia de formar militantes claves a través de la participación activa en el desarrollo del movimiento; el valioso apoyo de los adultos y antiguos miembros de la JOC a todos los niveles para ampliar el movimiento, proporcionando apoyo financiero y formación en liderazgo; redes de colaboración y alianzas que refuerzan la eficacia de las acciones y campañas de base y nacionales.
A pesar de estos puntos fuertes, se destacaron una serie de retos: garantizar la continuidad y sostenibilidad de los procesos de acción; dar respuesta al debilitamiento del desarrollo de militantes claves dentro de los grupos de base; superar la disminución del número de miembros y el problema de la emigración juvenil; mejorar la autofinanciación y lograr la autonomía financiera.
A pesar de los desafíos, los movimientos se mantienen firmes en su compromiso. Se animó a los principales militantes a seguir organizando y trabajando con las nuevas generaciones, haciendo hincapié en el uso de metodologías para desarrollar planes de acción e identificar a los líderes emergentes y a los/as protagonistas del cambio. Los movimientos nacionales respondieron al llamado de fortalecer los esfuerzos de solidaridad entre ellos para el beneficio colectivo de todos los/as jóvenes de América Latina.
Se formularon recomendaciones concretas para reforzar las acciones en curso y aumentar la visibilidad de los movimientos. También se hizo hincapié en la importancia de una fuerte coordinación para aumentar la eficacia de estas acciones.
Por último, los debates se extendieron a los aspectos internacionales, con especial atención al Centenario de 2025, el Consejo Internacional de 2026 y las elecciones intermedias. Los debates se centraron en la preparación de los movimientos nacionales de la JOCA para estos grandes acontecimientos, haciendo hincapié en que la participación en actividades internacionales no sólo beneficia al movimiento mundial, sino que también sirve para consolidar los movimientos nacionales.
Al participar en estos esfuerzos de colaboración y planificación estratégica, la JOCA continúa su misión de cambio profundo y fortalecimiento de la unidad y la solidaridad dentro de sus movimientos, a nivel nacional, regional e internacional.