La JOC está a punto de celebrar sus 100 años de existencia, pero antes de esta gloriosa fecha, pudo celebrar su 15º Consejo Internacional en Perú, del 27 de octubre al 7 de noviembre de 2022. Tuvo lugar en un contexto muy particular porque, como todas las organizaciones, la JOC se vió muy afectada por la pandemia: al no poder viajar, los dirigentes del movimiento, y a veces incluso los grupos de base, tuvieron que reorganizarse, recurriendo en la medida de lo posible a reuniones virtuales, y por tanto aplazando dos veces las fechas del Consejo Internacional. Poder celebrar el Consejo este año fue algo único y maravilloso.
Participaron delegaciones de todos los continentes y regiones: América del Norte, Centroamérica y el Caribe, Sudamérica, Europa Occidental, África Septentrional y Central, Asia Oriental y Meridional, y Oceanía. Por motivos de visa y otros, algunas delegaciones participaron virtualmente. También participaron en el consejo antiguos militantes de la JOCI y representantes de la Asociación Internacional Cardijn que hicieron lo posible para, hermanados con los militantes presentes, colaborar para el buen funcionamiento del consejo.
Poco después de la apertura pública y de los intercambios culturales y de acción organizados en Lima, Chiclayo y Pawana Anak Nauta, las delegaciones se reunieron en el distrito de Santa Eulalia durante las dos semanas siguientes para debates, análisis, intercambios y veladas culturales, y sobre todo para trazar las líneas estratégicas de la acción común del movimiento.
La JOCI elaboró su nuevo plan de acción internacional con el lema "Trabajo, Justicia e Igualdad para una Vida Digna - Seamos el cambio que los jóvenes necesitan para el futuro" que nos guiará durante los próximos 4 años. Sus principales prioridades son la lucha contra la precariedad laboral y el desempleo juvenil, y la lucha por una mayor igualdad de género. Propone la organización de los jóvenes en comunidades locales, en alternativas de economía social y solidaria, en asociaciones de trabajadores informales, así como el trabajo conjunto con sindicatos y células locales para la protección y la seguridad de los derechos y la salud de los trabajadores y trabajadoras y su participación en diferentes formas de organización para el respeto del medio ambiente, todas ellas formas de luchar contra las desigualdades que pesan sobre la vida de los jóvenes trabajadores.
Los problemas a los que se enfrentan la juventud trabajadora y la sociedad no pasaron desapercibidos para los y las líderes reunidos en Perú. La cuestión de la educación de calidad y transformadora, la migración, la desigualdad racial y de género y la lucha por la democracia y contra la incitación al odio forman parte del nuevo plan de acción de la JOCI para el futuro.
También pudimos poner en marcha nuestro plan para la celebración de los 100 años de la JOC en 2025, cuyos principales objetivos son dar más visibilidad a la acción actual de la JOC, llegar a más jóvenes trabajadores y difundir la herencia, la metodología y el patrimonio de Cardijn.
También se hizo hincapié en la creación de redes mediante el fortalecimiento de las alianzas con la Iglesia y las orientaciones del Papa Francisco y sus encíclicas, así como con organizaciones internacionales de trabajadores y otros movimientos sociales y medioambientales.
Por último, la JOCI eligió su coordinación internacional, compuesta por dirigentes con amplia experiencia sobre el terreno y en las coordinaciones nacionales. La JOCI tiene por misión desarrollar el movimiento en el contexto actual y, por tanto, formar a militantes y líderes procedentes de la base.
El 15º Consejo Internacional de la JOCI ha traído muchos desafíos y grandes oportunidades a nuestro movimiento internacional. En este espacio nacieron amistades y sinergias entre jocistas de todo el mundo. El plan de acción internacional trae estrategias claras para las campañas de acción de los próximos años. ¡Viva la JOC internacional! ¡Viva la lucha y la organización de los jóvenes trabajadores!